Se realizó este viernes por primera vez en Rosario la marcha contra la violencia institucional, el gatillo fácil, la estigmatización y las detenciones arbitrarias. En el camino, kilómetro 22, Gendarmería paró y retuvo a 60 jóvenes.
Una significativa convocatoria se movilizó este viernes, desde Plaza 25 de Mayo hasta Plaza San Martín, en Rosario, en el marco de la primera edición en esa ciudad de la Marcha de la Gorra, un espacio colectivo de resistencia conformado en distintos puntos del país hace más de una década. En la previa, sobre el kilómetro 22 de la autopista Santa Fe – Rosario, Gendarmería detuvo un colectivo con integrantes de la organización territorial La Dignidad, quienes fueron demorados por cinco horas. En un audio enviado a Agenda Abierta, una de sus militantes e integrante del centro de día Red Puentes, denunció la violencia institucional.
«Soy Sofía García, trabajadora social del centro de día Red Puentes, que labura los consumos problemáticos, y militante del movimiento popular La Dignidad de Santa Fe. Estábamos camino a la Marcha de la Gorra en Rosario, con un colectivo de sesenta compañeros y compañeras de la organización, pibes y pibas de los barrios, pibes y pibas que trabajan en espacios de educación, en copas, en cooperativas, que están siendo parte de talleres en la Red Puentes», comenzó el relato de la militante santafesina.
«Nos paró Gendarmería en el kilómetro 22 de la autopista Santa Fe – Rosario. Pidió los documentos de todo el mundo, requisó todas las mochilas, hizo bajar a todo los pibes y las pibas. Esto fue entre las once y media y las doce del día de hoy», describió García. «Después de eso se presentan tres situaciones: dos pedidos de paradero y un pedido de captura; todas situaciones legales que nosotros acompañamos desde el colectivo Red Puentes», informó. «Situaciones que ya estaban solucionadas pero no estaban bajadas del sistema, producto de la inoperancia de los funcionarios públicos y las fuerzas represivas del Estado», cuestionó.
Denunció que había «aproximadamente 15 gendarmes, una traffic y un patrullero. Estuvieron cinco horas para labrar las actas, nos cambiaban la información todo el tiempo, nos cambiaban la postura todo el tiempo, estuvieron mucho tiempo tomándonos el pelo». Además, lamentó que la situación recién se tranquilizó a las 16.40 de la tarde, cuando luego de hroas retenidos «dejaron que avance nuestro colectivo para la Marcha de la Gorra».
«Los pibes y las pibas venían super felices y con muchos deseos de manifestarse, de mostrar quiénes son, cuáles son sus laburos, cuáles son sus identidades, y toda esta situación represiva del Gobierno nacional y del Gobierno de la provincia nos lleva a que nosotros no hayamos podido desarrollar nuestro viaje con la felicidad que nos merecemos por todo el trabajo que realizamos cotidianamente», advirtió García en declaraciones a Agenda Abierta.
«Se llevaron a dos pibes y una piba, que son los que tenían las situaciones de paradero y captura respectivamente; situaciones que los fiscales ya habían levantado, cosa que les fue comunicado a Gendarmería, pero Gendarmería decidió proceder igual. Se fueron acompañados de nuestra abogada», señaló. «A dos de los pibes los van a dejar llegar a Rosario para que puedan participar de la Marcha de la Gorra, y una de nuestras compañeras, junto con la abogada, se va a tener que volver a Santa Fe», alertó.
«Estamos con mucha angustia, con mucha bronca, fue una situación super compleja, estamos muy cansados, salimos a las 8 de la mañana de nuestra ciudad», precisó la trabajadora social. «Y queremos denunciar el accionar de las fuerzas represivas del Estado, queremos participar de la Marcha de la Gorra, que era a lo que veníamos, y queremos construir una vida digna», finalizó.