Los gremios midieron una inflación del 6,7% en septiembre

La suba de precios en los primeros nueve meses de 2018 alcanzó el 32,2%, indicó el estudio del Instituto Estadístico de los Trabajadores (IET). Refleja el incremento de precios y el impacto específico en los trabajadores registrados.

Foto ilustrativa.

El IET, con apoyo logístico de la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo (UMET) y respaldo de 45 gremios de la CGT y la CTA, dio a conocer los números del relevamiento correspondiente a septiembre. Allí da cuenta de que el costo de vida de los argentinos asalariados se disparó un 6,7% mensual y acumuló un alza del 40,4% en los últimos doce meses, por lo que la inflación de 2018 será la más alta desde 1991.

A su vez, el informe indicó que la pérdida de poder adquisitivo de los salarios es del 14,7% desde noviembre de 2015, la caída más profunda desde 2002.

“La inflación anual fue del 43,8% para los asalariados con menores ingresos y del 38,1% para los que registran mejores salarios. Esto demuestra que la crisis de precios sigue apoyada sobre quienes destinan un porcentaje mayor de sus ingresos de los mismos a servicios públicos y alimentos, es decir, los más humildes”, dice el estudio.

Desde noviembre de 2015 cuando el IET empezó a realizar este informe, la inflación acumulada del decil uno (los que tienen menores ingresos) fue 33 puntos más alta que la del decil 10.

Los alimentos subieron 7,5% en septiembre, con subas mayores al 10% en aceites y cereales. Y sólo con la excepción de “vivienda”, todos los capítulos del IPC subieron por encima del 3% en septiembre.

Nicolás Trotta, rector de la UMET, afirmó que estos números no son opiniones críticas a un Gobierno sino resultados claros de una política económica que está direccionada en un sentido por una decisión política.

“Aquí mostramos estudios académicos, estadísticas con una metodología clara, transparente y certera, que indica que los resultados macro y microeconómicos son desastrosos y deben ser tenidos en cuenta por el Gobierno para modificar el rumbo”, expresó.

Según el rector de la UMET, “el país se dirige a la destrucción del mercado interno por la vía de la licuación salarial. Y sin mercado interno quebrarán cientos de miles de pymes que hoy generan más del 70% del empleo. Es una rueda viciosa en la que se ha ingresado y si no se sale a tiempo, la crisis económica y social será brutal”.

Fuente: Ámbito.