Paraná: vecinos de Lomas del Sur se autoconvocan contra la instalación de antenas

La Escuela Borges, de la capital entrerriana, como punto de encuentro que impida la colocación de antenas en distintos puntos de la ciudad. El convenio de la Municipalidad y Enacom, y las ordenanzas derogadas.

Foto Ilustrativa

 

Por Mariano Osuna

Este viernes, la comunidad de la Vecinal Lomas del Sur debate sobre los proyectos de la Municipalidad de Paraná en la instalación de 30 antenas distribuidas en la ciudad. La iniciativa oficial surgió luego de un acuerdo con el Ente Nacional de Comunicaciones, violatorio de distintas ordenanzas que prohíben su puesta en funcionamiento. La complicidad del Poder Judicial.

«No queremos antenas de telefonía celular en nuestro barrio», explicó la convocatoria en un escrito acercado a Agenda Abierta. «Tenemos derecho a la vida» se destacó. La cita colectiva es en la Escuela Borges, ubicada entre Calle de la Revolución y Arroyo Cazuela, desde las 20 hs.

El intendente Sergio Varisco firmó un convenio con Enacom, cuyo titular es Juan Diego Etchevehere, para permitir la instalación de antenas (30) y recibió 100 millones en septiembre de 2016. Lo cierto es que en Paraná existían ordenanzas que las prohibían, y que rápidamente fueron derogadas. Por ejemplo las legislaciones N° 8216, 8208 y 8459. Meses después, cerca de fin de año, aprobaron la ordenanza 9529, promulgada el 20 de diciembre de 2016 y publicada en el boletín oficial el 18 de enero 2017. Esta nueva normativa adhirió a la Ley Provincial N° 10.383.

Todo lo narrado es pasado porque la prohibición ya no es tal, y actualmente las empresas de telefonía celular tienen vía libre.  «Insomnio, mareos, dolor de cabeza y cáncer han aumentado en cercanías de las antenas», denunció la convocatoria de la Vecinal Lomas del Sur.

Paradójicamente las empresas y la Municipalidad las presentan como estructuras metálicas para soporte de publicidad que «además» tienen permitido usarlas de soporte de antenas para telefonía celular.

En cercanías a calle Artigas, los vecinos reclaman que se instaló una antena en una tarde mediante la empresa Punto Medio S.A. La comunidad de la zona presentó una acción de Amparo, que rechazó el juzgado laboral N° 2, a cargo del juez Guillermo Bonabotta, por «improcedente e inadmisible». Se apeló, pero nuevamente el Superior Tribunal de Justicia dictaminó contra la ciudadanía y a favor de las empresas. Alegan que no se pudo probar ninguna posibilidad de daño.

Lo cierto es que ante la inacción estatal, y de sus tres poderes, la ciudadanía involucrada es la única garante de visibilizar el tema e instalarlo en la agenda mediática y gubernamental para detener el proyecto municipal.