Paraná se movilizó contra la violencia hacia las mujeres

Luego de la lectura del documento único, cientos de personas marcharon desde plaza 1 de Mayo a Casa de Gobierno. Se exigió la emergencia en violencia de género y presupuesto genuino para erradicarla.

Foto: Facundo Saavedra

 

Paraná, como distintas ciudades de todo el país y del resto del mundo, se movilizó en el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las mujeres. En la capital entrerriana, la jornada de lucha estuvo organizada por la Asamblea Participativa de Mujeres, lesbianas, travestis y trans, conformada al calor de las movilizaciones populares del 8 de marzo y del 3 de junio por múltiples sectores sociales, gremiales, del movimiento de mujeres, de derechos humanos, de la disidencia sexual, políticos, sindicales, barriales y partidarios. La marcha atravesó las distintas instituciones que se denunciaron en el documento, desde la Municipalidad de Paraná, y la Iglesia Católica, hasta el Poder judicial, el Consejo General de Educación y la Casa de Gobierno.

La cita comenzó pasadas las 18 hs, entre cuerdas de tambores y consignas colectivas. Las mujeres, nuevamente en las calles, visibilizaron una deuda estructural en un país donde el machismo asesinó una mujer cada 30 horas y una ciudad como Paraná donde ocurrió un nuevo feminicidio mientras se marchó contra el patriarcado.

Documento público unificado, la oposición a las reformas, la emergencia provincial en violencia de género, la falta de presupuesto nacional, provincial y municipal genuino, la criminalización y la feminización de la pobreza, la necesidad de transformación de la salud, la educación, la cultura, las fuerzas de seguridad y el poder judicial, la inclusión y reparación histórica al colectivo Lgbtttiq y el abordaje del aborto como una cuestión de salud pública, parte del micrófono colectivo movilizado. Se recordó a las presas políticas, a Milagro Sala, a las mujeres mapuches y de los pueblos originarios y hubo solidaridad con al activista feminista Keili González.

Foto: Facundo Saavedra

 

La manifestación finalizó en Casa de Gobierno, entre reclamos urgentes y estructurales, y la puesta en la agenda pública de una problemática histórica, deuda de la democracia. La convocatoria dejó la impotencia de un nuevo feminicidio a una mujer, trabajadora, madre, donde el feminicida tenía perimetral y el Estado volvió a fallar.