Brasil: los sindicatos preparan una nueva huelga general contra Temer

Las centrales sindicales aprobaron este lunes el paro general para fines de junio, en fecha a definir, contra el gobierno de facto en ese país. Se crea un frente parlamentario para exigir elecciones directas.

 

Las centrales sindicales aprobaron durante este lunes la realización de una nueva huelga general contra las reformas y el Gobierno de Michel Temer. La protesta tendrá lugar a finales de junio, en fecha a ser definida, pero que quedará entre los días 26 y 30 del mes que viene.

Aunque algunos defienden la posibilidad de realizar una huelga de 48 horas, lo más probable es que sea elegido sólo un día. La decisión debe salir el próximo lunes (5 de junio), cuando los dirigentes volverán a reunirse en Sao Paulo. Desde el sector gremial de Brasil prometen un movimiento y acción más amplios que el registrado el pasado 28 de abril, cuando luego de mucho tiempo se realizó una huelga general en el gigante sudamericano,

Tal como señala el portal brasileño Rede Brasil Atual, en la tarde de ayer, representantes de nueve centrales se reunieron en la sede de la CTB, en la región central de São Paulo, para evaluar la marcha a Brasilia la semana pasada y definir las próximas acciones contra las reformas neoliberales que pretende aplicar el cada vez más debilitado mandatario.

Para el presidente de la UGT, Ricardo Patah, fue “el movimiento más fuerte y solidario de la última década”, incluso con acciones de posibles infiltrados durante el acto en la capital federal. “No podemos perder ese foco”, afirmó, aún antes del final de la reunión, refiriéndose a la tramitación de las reformas en el sistema de pensiones en la Cámara de Diputados, y la relacionada a los derechos laborales, en el Senado.

“Para nosotros, todo comienza y termina en las reformas, que tienen rechazo del 90% de la población”, reforzó el director ejecutivo de la CUT Julio Turra. Además del mantenimiento del “Fuera Temer” (Fora Temer), la preocupación es impedir la tramitación de las propuestas en el Congreso, incluso con una posible salida del presidente, que podría ser sustituido en una elección indirecta.

“A los ojos del mercado, Temer perdió credibilidad”, evalúa en la misma dirección Turra. Por eso, señala, las centrales de trabajadores, aunque no de forma tan unánime como se quisieran, defienden la postura de las elecciones directas como salida a la crisis política e institucional que atraviesa Brasil.

Fuente: El Ciudadano; Nodal.